脡rase una vez, en un pueblito muy lejano, dos ni帽os muy curiosos llamados Jack y Nell. Al llegar el invierno y acercarse la Navidad, sus mentes bailaban con el sue帽o de visitar la casa de Santa Claus y comprender c贸mo se las arreglaba para crear regalos para todos los ni帽os del mundo.
As铆 que se embarcaron en un arriesgado viaje, sobreviviendo a casi congelaciones, tormentas marinas y avalanchas para llegar al Polo Norte. Finalmente, despu茅s de una eternidad, se encontraron ante la morada nevada de Santa Claus.
鈥斅ola! Est谩n muy lejos de casa 鈥攕e rio Santa Claus, con su barriga redonda temblando como un cuenco lleno de gelatina.
鈥擰uer铆amos visitarte y ver d贸nde haces todos los regalos 鈥攔espondi贸 Jack.
Aunque se hab铆an enfrentado a numerosas pruebas en su viaje, la visi贸n de la casa de Santa Claus y la magia que conten铆a los llen贸 de alegr铆a y calidez. Santa Claus, siempre jovial y de buen humor, les dio la bienvenida y les explic贸 que ser Santa Claus no era solo diversi贸n y juegos.
A su alrededor, la casa estaba llena de maravillas. Se cos铆an vestidos de mu帽ecas, se descongelaban cuernos de hojalata y se constru铆an osos de peluche bailarines. Santa Claus estaba ocupado resolviendo problemas y asegur谩ndose que todo fuera perfecto para la pr贸xima Navidad.
Para asombro de los ni帽os, descubrieron que incluso el Polo Norte ten铆a sus problemas. El reno de Santa Claus, Prancer, se hab铆a lastimado, y las focas de Santa Claus se hab铆an soltado accidentalmente y se estaban comiendo los animales de madera para los juegos del Arca de No茅.
A pesar de todo el caos y la comedia, Santa Claus permaneci贸 imp谩vido y enfrent贸 alegremente todos los problemas. La se帽ora Noel, una espl茅ndida costurera y una excelente solucionadora de problemas, ayudaba siempre que pod铆a.
Jack y Nell no tardaron en darse cuenta que ser Santa Claus no era nada f谩cil. Hab铆a mucho para hacer y muchos problemas por resolver. Aprendieron que detr谩s de toda la magia y la alegr铆a que tra铆a Santa Claus, hab铆a mucho trabajo duro y compromiso.
Al ver a Santa Claus haciendo malabarismos con sus responsabilidades, expresaron sus preocupaciones:
鈥擟reer铆a que te dar铆a un ataque de nervios 鈥攄ijo Jack preocupado.
Santa Claus se rio y contest贸:
鈥斅h, no puedo adelgazar! A la gente le gusta m谩s Santa Claus gordo 鈥攕u esp铆ritu optimista era inquebrantable a pesar del caos que lo rodeaba.
Al final de la visita, Jack y Nell sent铆an un nuevo respeto por Santa Claus. Regresaron a casa con el coraz贸n lleno del esp铆ritu de la Navidad, comprendiendo que la verdadera alegr铆a est谩 en dar, y que todo esfuerzo cuenta para alegrar el d铆a a alguien.
Y en cuanto a Santa Claus, sigui贸 repartiendo alegr铆a, trabajando sin descanso hasta Nochebuena, asegur谩ndose que todos los ni帽os del mundo recibieran sus preciados regalos. A pesar de todo el caos y el trabajo duro, segu铆a sonriendo con el coraz贸n lleno de amor por todos los ni帽os del mundo.
A partir de entonces, cada vez que Jack y Nell ve铆an un regalo de navidad bellamente envuelto, recordaban su aventura en casa de Santa Claus y el trabajo amoroso e incansable que hab铆a detr谩s de cada regalo.
Y cuando cerraban los ojos cada Nochebuena, casi pod铆an o铆r la risa sincera de Santa Claus resonando desde el Polo Norte:
鈥斅o, jo, jo! Feliz Navidad a todos, y para todos, 隆buenas noches!